Antes de
aventurarse a una carrera en solitario bajo el pseudónimo de Marton Marton,
Martín Villulla ya participaba de forma activa en la escena indie argentina.
Estuvo a cargo de los sintetizadores flotantes en la banda de shoegaze
patagónico Atrás Hay Truenos, colaboró en proyectos solistas como el de Pantrö
Puto (guitarrista de El Mató a un Policía Motorizado), y creó el sello Lagunera
Discos, que además de editar su propia música, se encarga de difundir las
sonoridades propias de su Chascomús natal y otras ciudades de su país.
En el universo Marton Marton nada es objetivo ni ofrece una
única lectura, pero sí parece haber premisas claras: evitar el camino fácil,
privilegiar la construcción de atmósferas, y probar que es posible cuestionar
la realidad desde un estado particular de alteración de la conciencia. El combo
ideal para navegar por estos tiempos inciertos.